Morales quiere denunciar convención contra la coca

Associated Press
Lunes, 31 de enero, 2011

El presidente Evo Morales dijo que su país analiza la posibilidad denunciar la Convención sobre Estupefacientes de 1961, si la ONU no retira el veto al masticado de coca, una práctica ancestral entre los indígenas andinos.

En un encuentro con diplomáticos el lunes dijo que Bolivia "busca mecanismos y líneas de acción que podrían llevar hasta la denuncia de la Convención".

Sostuvo que espera con optimismo que Estados Unidos, Gran Bretaña y Suecia retiren su objeción al pedido boliviano de levantar la prohibición.

El lunes, la ONU, a través de su Consejo Económico y Social, debe pronunciarse sobre un pedido de Morales para retirar el veto al masticado de coca, que en Bolivia tiene una amplia aceptación, no sólo entre los indígenas.

Morales agradeció a los diplomáticos por el apoyo y reconoció que algunos países optaron por objetar por "falta de información", pero dijo que la decisión de Estados Unidos es "contradictoria".

Aclaró que su pedido no es para eliminar a la coca de la lista de sustancias prohibidas por la ONU, sino para levantar la prohibición "a la costumbre ancestral del masticado" de hojas secas que tiene efectos terapéuticos y alimenticios.

En un comunicado, Washington dijo que "reconoce que el acullicu (masticación de coca) es una costumbre tradicional en la cultura boliviana", pero que no apoyará la enmienda para "mantener la integridad de la Convención de 1961, que constituye una herramienta importante para la lucha mundial contra el narcotráfico".

Si sólo un país objeta, será rechazada la propuesta, y entonces Bolivia impulsará una campaña internacional para que la ONU llame a una conferencia internacional para analizar su pedido, anticipó el canciller David Choquehuanca.

La semana pasada, miles de indígenas se apostaron frente a la embajada estadounidense en La Paz y masticaron coca para reclamar que ese país retire su veto.

La coca es un estimulante suave con enorme valor social y religioso en la región andina. Aunque ayuda a combatir el hambre y el mal de altura, también es la materia prima para la elaboración de cocaína.